El debate académico en la Universidad: entre las softskills más valoradas en las entrevistas de trab
Hoy en día, cuando comiences a enfrentarte a procesos de selección para conseguir tu primer empleo o esas prácticas en la prestigiosa empresa que siempre quisiste poner en tu CV, te encontrarás con que, por muy buen estudiante que seas, hay 50 personas con las mismas o mejores notas, con un doble grado en una Universidad de más prestigio, con un poquito mejor nivel de inglés o, peor aún, ¡con alemán, francés y chino mandarín! En definitiva: si quieres trabajar en sitios prestigiosos y hacer CV en estos primeros años de carrera, que sepas que vas a tener dura competencia. Pero te puedes desmarcar y destacar gracias a un concepto que debes recordar: las soft skills.
¿Qué buscan en Recursos Humanos?
Una encuesta de la revista Forbes de mayo de 2012 arrojaba un resultado muy interesante: el 92% de los empleadores consultados consideraba que disponer de las soft skills adecuadas a la filosofía de la empresa era la clave a la hora de elegir candidato. Otro estudio del Instituto de Investigación de Stanford y la Fundación Carnegie Mellon establecía que que el 75% del éxito en el trabajo, si miramos en el largo plazo, será debido a las soft skills y tan sólo el 25% restante a las habilidades técnicas (o sea: a la carrera que hayas estudiado).

Pero ¿qué son las soft skills? Son el conjunto de habilidades sociales que pueden resultarte útiles a lo largo de tu carrera. O sea, aquellas competencias relacionadas con tu cociente de inteligencia emocional: personalidad arrolladora que englobe habilidades sociales, comunicación impactante, lenguaje… y también otras más famosas y tan manidas que te sonarán: “trabajo en equipo”, “proactividad”, etc.
Pues bien, aunque conseguir un pack personal decente de “habilidades blandas” sea complicado y mucho más difícil de adquirir que una habilidad técnica (hard skills) nueva, hay actividades que te van a desmarcar, y la práctica del debate es una de las más completas para conseguirlo.
Te cuento esta experiencia de primera mano, porque yo fui estudiante (bastante estudioso y con bastante miedo escénico) de Derecho de la UC3M y, pese a mis buenas notas, a la hora de ir a por mis primeros puestos de trabajo notaba un cierto déficit en mi CV en comparación con otros compañeros. Si: buenas notas, inglés, pero ¿qué quería un empleador de recursos humanos, a un tipo cuyo CV sólo demuestra que sabe estudiar manuales solitariamente en la biblioteca, o al estudiante al que se le intuye reflexivo, de mente abierta, que sabe trabajar en equipo y que, encima, habla y mira de forma arrolladora durante la entrevista de trabajo?

Yo elegí los torneos de debate académico como disciplina en la que entrenar muchas de esas habilidades tan demandadas, y es una experiencia que te recomiendo, porque se entrenan una gran cantidad de competencias que ahora te detallaré, y eso por no hablar de toda la gente que conoces de otros países y universidades. Así que ya sabes, si aún estás en la carrera y quieres dar una vuelta de tuerca a esas competencias y habilidades de la personalidad imbatible ¡apúntate a los torneos de debate universitarios que se celebren en tu Universidad!, y no dudes en preguntarnos para que te asesoremos sobre cursos de oratoria, torneos en tu zona, y preparación de los mismos.
¿Qué nos aporta la práctica del debate académico?
El debate académico es el modelo de debate más extendido en el circuito de competiciones universitarias de debate. Se trata de una competición intelectual que se presenta como una confrontación dialéctica entre dos equipos, con intervenciones sucesivas e intercaladas de los oradores de cada equipo, y en la que cada uno de ellos defiende una postura elegida por sorteo sobre un tema controvertido y de actualidad.
Un jurado, compuesto por miembros reconocidos de la Universidad, de la Administración Pública y de la empresa privada, evalúa las intervenciones de los oradores y decide quién es el vencedor con base en criterios que tienen en cuenta la lógica, la consistencia de los argumentos que sostienen la postura, y la puesta en escena. En España, el debate universitario cada día tiene más importancia, pero es en Estados Unidos y Gran Bretaña donde es muy popular. Universidades de prestigio como Oxford o Harvard llevan décadas apostando por estas actividades.

¿Y qué implica todo ello? Pues que si has participado en competiciones de debate, a ojos del empleador vas a destacar por varias razones. Para ser competente en un torneo debes dominar el arte de la comunicación: participar en un debate universitario supone un completo ejercicio académico en el que tendrás que enfrentarte a diversos retos. Por ejemplo, deberás asimilar las normas de funcionamiento, los tratamientos de cortesía, y usar técnicas retóricas y estrategias para conseguir persuadir al jurado sobre la solidez de